Criterios Software

El acceso al código fuente para revisión o modificación del software permite a los usuarios control y conocimiento sobre qué hace y qué no hace el mismo.

Al igual que es valioso conocer los ingredientes y datos nutricionales de lo que nos alimentamos, también lo es respecto a lo que ejecutamos en nuestros dispositivos.

Salvo indicado de forma contraria con la etiqueta Código cerrado, todo el software recomendado es de código abierto.

Wikipedia Código cerrado

La privacidad es un derecho fundamental de todo ser humano. Es la libertad de decidir qué parte de nuestra vida puede o no ser observada.

En el marco del software, es la libertad de decidir qué datos queremos compartir con quién.

La promesa de privacidad no es suficiente, son necesarias medidas que quiten peso al factor confianza:

1. Cifrado (E2EE, SSL, TLS, ...)
   La ofuscación de nuestros datos en tránsito asegura que sólo nosotros tenemos acceso a ellos.
2. Sin Telemetría o Rastreadores
   La monitorización exhaustiva de la actividad del usuario es una característica de muchos softwares modernos. La ausencia de esta vigilancia, o la opción a dar o revocar nuestro consentimiento, son escenarios más deseables.
3. Sin Publicidad
   Este tipo de intrusión suele ir unido al factor anterior. Somos estudiados porque venden nuestro perfil e intereses a anunciantes.
4. Código Abierto:
   El acceso al código nos permite discernir si una entidad está violando nuestro derecho a la privacidad. Es un factor indirecto, pero relevante.

Aunque cumpla con los criterios éticos, sin un diseño amigable, accesible y fácilmente utilizable, no será considerado para recomendación.

La experiencia de uso es crucial. No se trata únicamente de belleza (aunque un buen diseño es bello)

Por mucho que realice la tarea encomendada, si resulta un desafío a la paciencia o un gasto de tiempo ilógico, el remedio se convierte en enfermedad.

No se recomendará software con publicidad. Pues es contaminación visual y/o acústica, una molestia al uso.

Si es inevitable la inclusión de una excepción, se indicará con la etiqueta Con Publicidad

Por lo general, se preferirán herramientas con interfaz gráfica (GUI), evitando herramientas basadas en la consola de comandos (CLI).

Para softwares complejos de instalar o usar, se marcarán con la etiqueta Avanzado

Se priorizará el software presente en múltiples plataformas y fabricantes, por encima de aquel exclusivo a una o unas pocas.

El software recomendado estará disponible en los sistemas operativos gráficos más extendidos: Windows, MacOS, Linux, Android e iOS, salvo que se indique lo contrario, con una etiqueta Plataforma que señale su exclusividad.

Algunos fabricantes y proveedores tratan de crear dependencia alrededor de una plataforma, y limitan con ello la capacidad de elección del usuario. No queremos contribuir a ello.

La prueba del tiempo es de crítica importancia. Aquellos softwares que han demostrado su solvencia funcional y económica a largo plazo son los que pueden recomendarse con mayor tranquilidad.

Muchos proyectos prometedores acaban siendo vendidos al poco tiempo, o cesando su actividad cuando la economía aprieta un poco. Por eso tratamos de ejercitar la paciencia y ver cuáles están hechos para superar el temporal.

Aquellos proyectos que no sean activamente mantenidos dejarán de ser recomendados.

Es importante que el software se perpetúe en el tiempo, y no deje abandonados a sus usuarios, quedando obsoleto.